Artículos - 22 Mar 2018

La Importancia de la Economía Creativa en el Mundo

La Economía Creativa es una de esos términos del que aún cuando no sepamos mucho, resulta medio obvio al juntar el significado de las dos palabras. Efectivamente, se trata de cómo lo creativo favorece la generación de ingresos y creación de empleos -lo “hard” del término- además de la inclusión social, la diversidad cultural y el desarrollo humano -el lado “soft”-.

A grandes rasgos, se trata de industrias como: publicidad, arquitectura, arte, artesanía, diseño (gráfico, textil, de joyería), moda, cine, video, videojuegos, música, conciertos, artes escénicas, editorial, software interactivo de entretenimiento, radio y televisión. Y seguro nos dejamos alguna.

Con todo esto y sabiendo que estamos inmersos en el boom del contenido, no es difícil adivinar que ésta es una de las industrias que más crece a nivel nacional. Algunos datos: México es el país número 18 en el ranking de exportación de productos creativos, y aunque puede sonar poco, es el 1 a nivel Latinoamérica; aporta 7.5% del PIB y es el 3er o 4to sector económico en México – sólo después de la maquila, el petróleo o el turismo-. Además, en países como el nuestro, donde la economía informal es tan grande, no deberíamos olvidar la creatividad no formal (se estima que represente entre 24 y 40% del pastel).

Es decir que mientras el país crece 2% económicamente, estas industrias crecen hasta 10%. Una de sus principales fortalezas es que no se ven tan influenciadas por las crisis económicas; en teoría sólo se necesita de gente talentosa con capacidad de generar innovación, y contenidos estéticos y sociales que estén a la altura de la constante demanda actual.

Pero, ¿cuál es el lado oscuro de esto?

Si bien no se trata de un insumo finito como el petróleo, sí es un reto pensar a la creatividad como inagotable.

Cada vez se escribe más del creative burnout: desde tips acerca de cómo combatirlo hasta lo que nos enseña. O por ejemplo, se habla de que un porcentaje escandaloso las series de tv y películas más taquilleras no son sino adaptaciones de otros materiales: El Señor de los Anillos, Game of Thrones; series exitosas como American Gods, The Handmaid’s Tale o Big Little Lies. Todos ejemplos de historias basadas en libros. Y qué decir de la cada vez más lucrativa industria de películas de superhéroes basadas en comics añejos.

Especialmente en el contexto de industrias creativas es pertinente preguntarnos ¿qué tan exigente se vuelve ser creativo? ¿Es o no agotador estar innovando constantemente? ¿Estamos en una crisis?

Lo cierto es que vivimos en una era en donde se demanda cada vez más de nosotros: ser buenos en todo, ser mejores cada vez; y claro que ser creativo no es la excepción. Tus competidores pueden ser más creativos que tú; tú tienes que ser más creativo que tú mismo en el pasado. Nuevos formatos, nuevos medios, nuevos contenidos, nuevas maneras de hacer las cosas… esto no parece detenerse.

La Economía Creativa parece ser una apuesta segura en el futuro, incluso para las industrias tradicionalmente no-creativas que tienen que encontrar nuevas soluciones, contratar personas con perfiles out-of-the-box, llevar a cabo procesos de maneras distintas. Se trata de un skill básico que representa dinero y que es necesario alimentar constantemente con nuevas herramientas. Si tu empresa o negocio no lo tiene por default, este es el momento de plantearse rodearte de partners que sean tu mano derecha creativa y eleven el nivel de innovación que el contexto demanda.

Escrito por: de la Riva Group

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